La ballena alada

A los guardas de la Reserva Marina del Parque Natural del Montgó se les debió acelerar (mucho) el corazón cuando contemplaron aquella mole salir del agua y romper con un estallido atronador la superficie del mar al volver a caer. Quince metros y treinta toneladas de espectáculo animal: las yubartas nos han vuelto a visitar.

La noticia salió -ilustrada con la foto que ilustra el post- en el diario Información de Alicante. Dos ballenas yubartas (Megaptera novaeangliae), también conocidas como Ballenas jorobadas o Jibartes, pasaron a poco menos de un kilómetro de las concurridas playas de Jávea.

La noticia tiene su miga, ya que son muy raras las citas de esta especie en las costas ibéricas ( tres citas hasta 2005 -en el mar de Alborán, Menorca y la Costa Brava-, un jibarte extraviado este agosto en el puerto de Algeciras...). Esta preciosa ballena está catalogada a nivel estatal como en Peligro de Extinción y, a nivel global, se estima que quedan unos 34.000 individuos, un número bastante aceptable, teniendo en cuenta que entre 1904 y 1983 la industria ballenera arponeó a 200.000 yubartas.

Nuestra amiga jorobada es el misticeto (ballena con barbas) que posee las aletas pectorales más largas -casi un tercio de su longitud total-, rasgo que explica la primera parte de su nombre en latín, Megaptera. Su actitud confiada y juguetona, sus espectaculares saltos y su peculiar y bello canto la han hecho una de las estrellas de los amantes de los mamíferos marinos. Que vengan a dar unas brazadas por nuestras costas -tan a trasmano de sus oceános habituales- es como para emocionarse.


Comentarios