... y amarillo a la genista

El otro día la Serralada de Marina, en su vertiente de Santa Coloma, estaba a reventar de genista florida. Las corolas parecían recien estrenadas y el aire bullía de abejorros y mariposas prestos a darse un atracón de néctar. Vi rastros de conejo, descubrimos un pobre Erizo europeo muerto y comprobamos que el poblado ibérico de Puig Castellar seguía en su sitio, cuajado, eso sí de estepa blanca florida. Como el día estaba claro se veían perfectamente la montaña de Montserrat y Sant Llorenç de Munt y el mar reverberaba espléndido desde Montjuïc a Vilassar; sólo la chimenea de la incineradora de Barcelona y la inevtable boina de contaminación y ruido de la ciutat comtal y sus conglomerados vecinos enturbiaban el aire limpio de finales de abril.

La Serralada de Marina son una serie de pequeños cerros que escoltan el mar al norte de Barcelona y por cuyas laderas escalan Badalona, Santa Coloma, Tiana, Montcada i Reixac y Sant Fost de Campsentelles. Está protegida por un Pla Especial que, seguramente, llegó demasiado tarde. Hay mucha urbanización desbocada entre sus robledales de umbría y la parte sur está devastada por dos décadas de incendios forestales. Sin embargo, la recuperación de la sierra se está produciendo, aunque a ritmo pausado: los robledales se regeneran poco a poco en la zona norte de la sierra y en la parte sur, las coscojas van ocupando las laderas quemadas, ayudadas en algún punto por iniciativas de asociaciones locales, como la del centro excursionista de Santa Coloma, que ha recuperado en buena parte la vegetación del Torrent de les Bruixes.

Comentarios

David Molina Molina ha dicho que…
como siempre muy interesante.

un abrazo.

Vienes a fredes?
Train ha dicho que…
¡¡Qué bien huelen las gayombas!! en Málaga podrías llorar con la urbanización salvaje, ayer descubrí otro punto de descarga ilegal de escombros en mi barrio, que linda con el campo. ¿Y qué hago? sinceramente...
Train ha dicho que…
mmm ¿genista?
Emilio Martín Estudillo ha dicho que…
Gayombas! No sabía que se llamaban así por esos sures. Lo de la urbanización salvaje es una plaga de la que pocos se libran,te lo digo yo, que hasta hace poco vivía en el País Valencià...y soy boquerón ;-) (por los pelos, todo hay que decirlo).
Hablando en plan hombre de acción, creo que, en un primer momento, esas barbaridades se han de denunciar a la autoridad municipal (la policía local). Toque o no toque monte siempre se puede acudir al SEPRONA, y si en realidad estamos hablando de monte, se puede ir directamente a los Agentes de Medio Ambiente, que en Andalucía funcionan razonablemente bien (en comparación con otras comunidades). No sé cuál es tu experiencia en tema denuncias, pero podría ser un buen comienzo, si nunca lo has hecho...
Un abrazo y que vivan las gayombas!
Train ha dicho que…
Nop, nunca lo he hecho porque nocreí que sirviera de mucho, cada vez que se habla de Málaga es para anunciar la detención de algún mafioso ó corrupto. Había pensado fabricarme algunos cartelillos con "no soy un vertedero" pero lo que propones es lo más sensato...